Santa mía, Santa Marta,
yo me acojo a tu protección
y en prueba de mi afecto
te ofrezco esta luz
que en tu honor encenderé
todos los martes.
Consuélame en mis penas
y por la infinita dicha
que tuviste de hospedar
en tu casa al Salvador,
nuestro Señor Jesús,
intercede por mí
y por toda mi familia,
para que siempre conservemos
nuestros corazones a Dios
y sean resueltas
nuestras necesidades.
Yo te suplico
tengas misericordia
al favor que hoy te pido
(hacer ahora con fe la petición)
Te ruego Santa mía,
que venzas todo lo difícil
que hay en mi petición,
como venciste al dragón
que tienes a tus pies.
La novena según la tradición se debe empezar el día martes y hacer nueve dísa seguidos.
Encender una vela delante de la imagen de la santa para fortalecer la petición.