Oh benignísimo san Marcos de León,
que por gracia de Dios,
y guiado por el Espíritu Santo
predicaste la Palabra
y serviste a Cristo con fidelidad,
te suplico, por los méritos de su Pasión y muerte
me defiendas, libres y ampares,
de toda mala persona, enemigo y maldad,
te pido que tu protección me asista
todos los días de mi vida.
Bendito san Marcos,
pide por mí al Señor,
para que por tu poder y valiosa intercesión
pueda vencer y dominar al enemigo
y así sea alejado y librado
de todo lo que me cause daño y mal.
Oh glorioso san Marcos,
que amansaste la draga y el dragón,
amánsame los toros bravos
que también del monte son.
Amánsame los enemigos
para que vengan humildes ante mí,
como se humillo Cristo delante de Pilato,
que sin necesidad de malos tratos,
como oveja, símbolo de humildad, lleguen a mí;
envíales sin distinción de clases o de nación,
para que ya arrepentidos, obtengan el perdón.
Déjalos si no creyentes dudan de la verdad;
de los rumores de la fuente cristalina,
con suavidad divina hacia la realidad,
hazlos venir, Señor Omnipotente,
a tomar en mi fuente aguas de humildad.
Paz Cristo, Cristo paz, paz Cristo, Cristo paz.
Oh Dios, Señor nuestro,
que sublimasteis a vuestro evangelista San Marcos
con la gracia de la predicación evangélica,
os suplicamos nos concedáis
que nos aprovechemos siempre de sus enseñanzas
y seamos defendidos por su intercesión.
Os rogamos Señor Dios nuestro,
que vuestros sagrados misterios
nos presten auxilios continuo,
y por las súplicas del Evangelista san Marcos,
nos defiendan siempre de toda adversidad,
de todo mal, enemigo y peligro.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
Así sea.
que por gracia de Dios,
y guiado por el Espíritu Santo
predicaste la Palabra
y serviste a Cristo con fidelidad,
te suplico, por los méritos de su Pasión y muerte
me defiendas, libres y ampares,
de toda mala persona, enemigo y maldad,
te pido que tu protección me asista
todos los días de mi vida.
Bendito san Marcos,
pide por mí al Señor,
para que por tu poder y valiosa intercesión
pueda vencer y dominar al enemigo
y así sea alejado y librado
de todo lo que me cause daño y mal.
Oh glorioso san Marcos,
que amansaste la draga y el dragón,
amánsame los toros bravos
que también del monte son.
Amánsame los enemigos
para que vengan humildes ante mí,
como se humillo Cristo delante de Pilato,
que sin necesidad de malos tratos,
como oveja, símbolo de humildad, lleguen a mí;
envíales sin distinción de clases o de nación,
para que ya arrepentidos, obtengan el perdón.
Déjalos si no creyentes dudan de la verdad;
de los rumores de la fuente cristalina,
con suavidad divina hacia la realidad,
hazlos venir, Señor Omnipotente,
a tomar en mi fuente aguas de humildad.
Paz Cristo, Cristo paz, paz Cristo, Cristo paz.
Oh Dios, Señor nuestro,
que sublimasteis a vuestro evangelista San Marcos
con la gracia de la predicación evangélica,
os suplicamos nos concedáis
que nos aprovechemos siempre de sus enseñanzas
y seamos defendidos por su intercesión.
Os rogamos Señor Dios nuestro,
que vuestros sagrados misterios
nos presten auxilios continuo,
y por las súplicas del Evangelista san Marcos,
nos defiendan siempre de toda adversidad,
de todo mal, enemigo y peligro.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
Así sea.
(Pedir ahora lo que se quiere conseguir)
Rezar el Credo, Padrenuestro y Gloria.
Hacer la oración y los rezos por tres días seguidos y cada día se tiene que decir la oración y los rezos tres veces, el mejor día para empezar es un sábado.