Abro mis puertas, con el fin y la buena fe,
a los siete espíritus de la fortuna,
a las poderosas y santas siete Potencias.
Que algún día lleguen a mi casa,
que la fortuna, la dicha y la salud
estén en mis puertas.
Por los siete Pueblos Principales,
por los siete Libros Sagrados,
por los siete Candelabros del Templo de Salomón,
por los siete Huesos de la Cabeza de Dios,
por los Santos Ángeles Guardianes,
por San Miguel Arcángel, San Rafael, San Gabriel,
Guía y Guarda de Dios.
Y que la bendición de Dios Padre Omnipotente
del Hijo y del Espíritu Santo
descienda sobre nosotros.
Así sea.
a los siete espíritus de la fortuna,
a las poderosas y santas siete Potencias.
Que algún día lleguen a mi casa,
que la fortuna, la dicha y la salud
estén en mis puertas.
Por los siete Pueblos Principales,
por los siete Libros Sagrados,
por los siete Candelabros del Templo de Salomón,
por los siete Huesos de la Cabeza de Dios,
por los Santos Ángeles Guardianes,
por San Miguel Arcángel, San Rafael, San Gabriel,
Guía y Guarda de Dios.
Y que la bendición de Dios Padre Omnipotente
del Hijo y del Espíritu Santo
descienda sobre nosotros.
Así sea.
Repetir la oración tres días seguidos
Para que sea mas efectiva:
Copia la oración con tinta negra en siete papeles blancos.
Dobla cada papel en cuatro y quémalos.
Guarda las cenizas en una bolsita de tela natural y llévala contigo.
También puedes colocarla sobre boletos de juego.
Para que sea mas efectiva:
Copia la oración con tinta negra en siete papeles blancos.
Dobla cada papel en cuatro y quémalos.
Guarda las cenizas en una bolsita de tela natural y llévala contigo.
También puedes colocarla sobre boletos de juego.