Gloriosa Santa Bárbara Lukumí,
mi virgen negra,
mi madre santísima,
que en la tierra Yesa naciste,
y por tus potencias divinas,
por tus dotes de poder y de bondad,
al cielo te llevaron.
Te tengo tanta devoción que admiro tus grandezas
y a ellas confío,
para que me libres del fuego,
de las llamas y candelas,
hechicerías, muerte repentina,
cuides los alrededores de mi casa (trabajo o negocio)
contra los malos ojos
las personas difamadoras, ruines y traicioneras,
para que me protejas contra las malas influencias,
contra la envidia, los celos y la mala fe.
Con tu santo poder, victoriosa vencerás
y con tu manto me protegerás;
con tus manos me bendecirás;
con el santo poder que Dios te otorgó
y tu ensalmo espiritual
vencerás sin retroceder
y siempre estarás firme en tu decisión
para proteger a tus fieles devotos
que imploran protección.
Fortifica a tus hijos,
líbrame Madre mía de toda tentación
no me abandones en el olvido
y aléjame de todo peligro con tu poder inmenso.
Tú que eres firme y nunca retrocedes
porque Dios Todopoderoso te dio ese poder,
con tus fuerzas Lukumí
por siempre triunfe el que esta oración lleve consigo.
Tú que en la tierra Yesa todos te admiran tu poder,
así con tu espada nos defenderás
y con tu manto nos cubrirás.
Santa Bárbara, Lukumí, del mal nos libres.
Santa Bárbara, Lukumí, esté conmigo.
Santa Bárbara, mi amiga,
Reina y Madre, escúchame, atiéndeme,
concédeme, te suplico, mis peticiones,
este es el ruego que sale sincero de mi corazón.
¡Santísima madre mía,
gracias por haber oído lo que con fe solicito,
y que dios aumente tus ensalmos
para que con los mismos nos aumentes la fe,
la esperanza y la caridad,
y la gracia de que viviendo y muriendo
te alabe y bendiga por siempre!
Amén.
mi virgen negra,
mi madre santísima,
que en la tierra Yesa naciste,
y por tus potencias divinas,
por tus dotes de poder y de bondad,
al cielo te llevaron.
Te tengo tanta devoción que admiro tus grandezas
y a ellas confío,
para que me libres del fuego,
de las llamas y candelas,
hechicerías, muerte repentina,
cuides los alrededores de mi casa (trabajo o negocio)
contra los malos ojos
las personas difamadoras, ruines y traicioneras,
para que me protejas contra las malas influencias,
contra la envidia, los celos y la mala fe.
Con tu santo poder, victoriosa vencerás
y con tu manto me protegerás;
con tus manos me bendecirás;
con el santo poder que Dios te otorgó
y tu ensalmo espiritual
vencerás sin retroceder
y siempre estarás firme en tu decisión
para proteger a tus fieles devotos
que imploran protección.
Fortifica a tus hijos,
líbrame Madre mía de toda tentación
no me abandones en el olvido
y aléjame de todo peligro con tu poder inmenso.
Tú que eres firme y nunca retrocedes
porque Dios Todopoderoso te dio ese poder,
con tus fuerzas Lukumí
por siempre triunfe el que esta oración lleve consigo.
Tú que en la tierra Yesa todos te admiran tu poder,
así con tu espada nos defenderás
y con tu manto nos cubrirás.
Santa Bárbara, Lukumí, del mal nos libres.
Santa Bárbara, Lukumí, esté conmigo.
Santa Bárbara, mi amiga,
Reina y Madre, escúchame, atiéndeme,
concédeme, te suplico, mis peticiones,
este es el ruego que sale sincero de mi corazón.
¡Santísima madre mía,
gracias por haber oído lo que con fe solicito,
y que dios aumente tus ensalmos
para que con los mismos nos aumentes la fe,
la esperanza y la caridad,
y la gracia de que viviendo y muriendo
te alabe y bendiga por siempre!
Amén.
Hacer la oración y los rezos tres días seguidos.