En nombre de Dios Todopoderoso,
que los malos espíritus se alejen de aquí
y que los buenos nos sirvan de baluarte contra ellos.
Espíritus malhechores que inspiráis
malos pensamientos a los hombres;
espíritus tramposos y mentirosos que los engañáis;
espíritus burlones que abusáis de su credulidad
os rechazo con todas las fuerzas de mi alma,
y cierro el oído a vuestros engaños y argucias;
pero deseo sobretodo,
que se derrame sobre vosotros la misericordia de Dios.
Espíritus buenos y benéficos que os dignáis asistirme,
purificadme, limpiadme, protegedme,
eliminad de mi vida todo mal enviado,
alejad de mí todo lo negativo,
alejad todo daño y maldad de mi alrededor.
Dadme fuerzas para resistir los ataques,
enredos e influencia de los malos espíritus,
y la luz necesaria para no ser la burla
de sus perversas intenciones.
Preservadme del orgullo y de la presunción,
separad de mi corazón los celos,
el odio, la traición y la malevolencia
y todo sentimiento contrario a la caridad,
porque son otras tantas puertas abiertas al espíritu del mal.
Así sea.
que los malos espíritus se alejen de aquí
y que los buenos nos sirvan de baluarte contra ellos.
Espíritus malhechores que inspiráis
malos pensamientos a los hombres;
espíritus tramposos y mentirosos que los engañáis;
espíritus burlones que abusáis de su credulidad
os rechazo con todas las fuerzas de mi alma,
y cierro el oído a vuestros engaños y argucias;
pero deseo sobretodo,
que se derrame sobre vosotros la misericordia de Dios.
Espíritus buenos y benéficos que os dignáis asistirme,
purificadme, limpiadme, protegedme,
eliminad de mi vida todo mal enviado,
alejad de mí todo lo negativo,
alejad todo daño y maldad de mi alrededor.
Dadme fuerzas para resistir los ataques,
enredos e influencia de los malos espíritus,
y la luz necesaria para no ser la burla
de sus perversas intenciones.
Preservadme del orgullo y de la presunción,
separad de mi corazón los celos,
el odio, la traición y la malevolencia
y todo sentimiento contrario a la caridad,
porque son otras tantas puertas abiertas al espíritu del mal.
Así sea.
Rezar tres Credos, Padrenuestro y Gloria.
Repetir la oración y los rezos tres días seguidos.
Repetir la oración y los rezos tres días seguidos.