Hoy yo ......
(tu nombre, apellidos, fecha nacimiento)
en este momento, lugar y día
me reconozco ante Tí Señor Jesucristo como pecador,
y te pido humildemente el perdón de mis pecados.
Hoy te suplico te dignes Señor mirarme
con tus ojos llenos de bondad y amor
y conviertas toda la oscuridad de mi vida
en radiante luz tuya,
por favor Señor lávame con Tu Preciosa Sangre,
cúbreme con tu manto,
extiende hacia mi tu Poderosa Mano
y consuela mi alma, calma mi intranquilidad.
Te suplico Señor Jesús
quites de mí camino todos los obstáculos y trabas,
tanto espirituales como materiales,
que entorpecen y dificultan mi existencia.
Aleja Señor mio toda maldad, envidia,
daño, o mala voluntad lanzada contra mi persona,
y contra mi familia, mis posesiones y lo que me rodea
e incrementa día a día mi fe en Ti.
Átame al Corazón Santísimo de tu Madre
la Señora y Reina del Cielo, mi amada Virgen María,
para que nada pueda herirme y dañarme.
Haz que en mi vida se aloje el bienestar,
que pueda avanzar y mejorar laboralmente,
que todo lo que emprenda sea fructífero,
que mis inversiones estén llenas de suerte y fortuna;
haz que mi vida sentimental sea plena,
que tenga a mi lado a la persona amada
y que consiga ser correspondido en el amor;
permíteme alcanzar la prosperidad material
y tener todo lo necesario para vivir holgadamente,
dame tu ayuda para que mis sueños se realicen,
sobre todo, Señor mío, concédeme:
(pedir lo que se quiere obtener).
Señor te lo pido creyendo en Tu Voluntad Santísima
y en Tu Infinita Misericordia y Sabiduría.
Hoy quiero renunciar a todo lo que no es digno
ni grato ante tus ojos,
y pongo mi total confianza en tu Poder,
Señor Jesús, Dios Hijo, Salvador de Amor sin limites,
sabiendo que tu siempre escuchas
las suplicas sinceras de mi alma
y que no me negarás tu ternura y clemencia
para solucionar mis adversidades y carencias.
Así sea.
(tu nombre, apellidos, fecha nacimiento)
en este momento, lugar y día
me reconozco ante Tí Señor Jesucristo como pecador,
y te pido humildemente el perdón de mis pecados.
Hoy te suplico te dignes Señor mirarme
con tus ojos llenos de bondad y amor
y conviertas toda la oscuridad de mi vida
en radiante luz tuya,
por favor Señor lávame con Tu Preciosa Sangre,
cúbreme con tu manto,
extiende hacia mi tu Poderosa Mano
y consuela mi alma, calma mi intranquilidad.
Te suplico Señor Jesús
quites de mí camino todos los obstáculos y trabas,
tanto espirituales como materiales,
que entorpecen y dificultan mi existencia.
Aleja Señor mio toda maldad, envidia,
daño, o mala voluntad lanzada contra mi persona,
y contra mi familia, mis posesiones y lo que me rodea
e incrementa día a día mi fe en Ti.
Átame al Corazón Santísimo de tu Madre
la Señora y Reina del Cielo, mi amada Virgen María,
para que nada pueda herirme y dañarme.
Haz que en mi vida se aloje el bienestar,
que pueda avanzar y mejorar laboralmente,
que todo lo que emprenda sea fructífero,
que mis inversiones estén llenas de suerte y fortuna;
haz que mi vida sentimental sea plena,
que tenga a mi lado a la persona amada
y que consiga ser correspondido en el amor;
permíteme alcanzar la prosperidad material
y tener todo lo necesario para vivir holgadamente,
dame tu ayuda para que mis sueños se realicen,
sobre todo, Señor mío, concédeme:
(pedir lo que se quiere obtener).
Señor te lo pido creyendo en Tu Voluntad Santísima
y en Tu Infinita Misericordia y Sabiduría.
Hoy quiero renunciar a todo lo que no es digno
ni grato ante tus ojos,
y pongo mi total confianza en tu Poder,
Señor Jesús, Dios Hijo, Salvador de Amor sin limites,
sabiendo que tu siempre escuchas
las suplicas sinceras de mi alma
y que no me negarás tu ternura y clemencia
para solucionar mis adversidades y carencias.
Así sea.
Rezar tres Padrenuestros y tres Glorias.
Hacer la oración y los rezos tres días seguidos.